martes, 17 de noviembre de 2015

Racismo e islam en Francia, temas de la nueva novela de Michel Houellebecq

Racismo e islam en Francia, temas de la nueva novela de Michel Houellebecq

En su polémico libro, ‘Sumisión’ el escritor galo advierte el crecimiento del islam en su país donde ya es la segunda religión con más fieles.
Racismo e islam en Francia, temas de la más reciente novela de Michel Houellebecq
La presencia de los musulmanes en Francia es todo un tema. El atentado a la revista Charlie Hebdo y los recientes ataques en París, son atisbos de un problema que tiende a crecer. Se calcula que en el país galo hay 6 millones de musulmanes y el islam ya es la segunda religión a nivel nacional.
En consecuencia el racismo ha florecido nuevamente. En los últimos tiempos el arte ha dado cuenta de ello, no hace mucho en México se pudieron ver un par de películas que desde la comedia abordaron el rechazo al migrante: Dios mío, ¿pero qué hemos hecho?, de Philippe de Chauveron y Los invenciblesde Frédéric Berthe. Ambas abordan la cuestión con cierta ligereza pero permiten sondear al fenómeno del que se ocupa, Sumisión (Anagrama), la nueva novela del polémico Michel Houellebecq (Reunión, Francia, 1958) y por la que el autor ha recibido más de una amenaza.
La premisa de Sumisión es clara: en el año 2022 el partido musulmán llega al poder en Francia. La historia pasa por la mirada de Francois, un académico de La Sorbona experto en el escritor del siglo XIX, Joris-Karl Husymans, con quien por cierto tiene varios rasgos en común.
Houellebecq plantea la transición del poder desde el mundo intelectual, sin duda el que mejor conoce. Casi todos los personajes son maestros universitarios y no escapan al sarcasmo ni la crítica; Rediger, rector de La Sorbona se convierte sin demasiados sacrificios al islam y gracias a sus virtudes para la política no solo hace del plantel un semillero del islamismo, él se convierte en pieza importante de mandatario electo Mohammed Ben Abbes. La estrategia de los musulmanes es por demás inteligente, su forma de afianzarse en Francia es por medio de la educación, no de la economía. Apuestan -y lo consiguen a paso lento-,  por cambiar la forma de pensar europea. Apelan a la decadencia y corrupción del ciudadano del Viejo Continente quien  hacen propios preceptos del islam, uno de los mejor recibidos es la poligamia.
Si bien estamos ante una ficción, es innegable que la construcción argumental de Sumisión, la acerca a la realidad, de hecho Houellebecq amplía el horizonte y advierte la expansión del islam por el resto de Europa. Lo que en la superficie es una novela política en el fondo esconde un planteamiento moral. Francia es víctima de su conservadurismo, y el ser humano es y seguirá siendo víctima de sus debilidades.

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